CAPÍTULO XVI
"Encuentro Inesperado"
Se puso el abrigo y entró en el ascensor. Saludó al portero con las primeras palabras que se aprenden de un nuevo idioma y salió a la calle.
Era martes 30 de marzo, a pesar de que el invierno ya había finalizado, las temperaturas no superaban los diez grados. Aún era pronto y tenía tiempo de parar a tomar un cafe antes de dirigirse hacia la enfermería del club. Su esguince de rodilla evolucionaba favorablemente y en una semana estaría totalmente recuperado.
Su equipo había conseguido vencer a la Juventus el pasado sábado, con una superioridad bastante clara y posiblemente el mejor partido que había hecho esta temporada. Sebastián lo vió desde la grada con Adrián Gonzalez que también arrastraba molestias.
Entró en una cafetería y sacó de su bolsillo un pequeño diccionario español-italiano para no equivocarse a la hora de pedir el desayuno.
Una camarera de aspecto juvenil como él, de pelo negro muy largo y unos ojos verdes que llamaban la atenció de cualquiera se acercó al chico.
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Sebastián: Un caffe latte per favore.
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Camarera: Bueno figura, ahora te lo traigo.
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Sebastián: Ah... sos argentina?
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Camarera: Si, de Rosario.
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Sebastián: Ah que bueno, pero decimelo antes che así me ahorro hacer el ridiculo.
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Camarera: Jajaja, quería ver si vas aprendiendo, pero veo que si no es por el diccionario...
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Sebastián: Si si, es mi salvación, porque sinó...
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Camarera: Bueno yo llevo acá casi cinco años, te puedo enseñar... si querés claro.
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Sebastián(vergonzoso): Bu... Bueno.
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Camarera: Ahora te traigo el café con leche y te apunto mi numero en un papel. Vos firmame una autografo asi cuando saques campeona del mundo a Argentina lo vendó jajaja.
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Sebastián: Jajaja, dale.
Como había poca gente en la cafetería en ese momento, la chica se sentó con el y estuvieron charlando un largo rato, hasta que Sebastián tuvo que irse. De camino, pensó en esa chica que había conocido. Era muy simpática y agradable, además de ser preciosa con unos ojos verdes espectaculares. Estuvo un poco tenso mientras la tenía delante y nunca le había sucedido una cosa así. En su mano llevaba el papel en el que se leía: ESTEFANÍA - 192121991
Miraba constantemente el número y le resultaa extraño, como si estuviera relacionado con el, hasta que se paró de golpe y se dió cuenta do lo que era, se quedó inmóvil. El número de teléfono era su edad (19) y su fecha de nacimiento(21-2-1991) !!!
Estadio Fiurili, en la ciudad de Udine